TEMA DEL MES

TEMA DEL MES

mayo 13, 2018

CUADERNO ESPIRITUAL PARA ESTA SEMANA


TEMA DE LA SEMANA: DESEOS QUE BATALLAN CON EL ALMA



Como creyentes podemos tener paz en cuanto a nuestra salvación, pero, no caminar en paz aquí en el mundo.

Gálatas 5:16-17 dice, “Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis”.

(1) El Espíritu es la defensa de nuestra alma. La exhortación de La Palabra es que “andemos en el Espíritu”. Solo hay dos maneras en que podemos andar: En el Espíritu o en la carne. Para ser salvos y tener victoria sobre Satanás, el pecado y la muerte, tuvimos que obedecer la instrucción del Espíritu. Nos arrepentimos, pedimos perdón y entregamos nuestra vida a Jesús, naciendo espiritualmente a la familia de Dios. ¡Aleyupi! Nuestra alma fue librada del infierno, ¡eternamente! Pero, si no seguimos las instrucciones del Espíritu en el diario vivir, así como el Rey David, podemos perder el gozo de nuestra salvación. El Espíritu Santo es la defensa de nuestra alma.

(2) Nuestra carne siempre será tentada a hacer el mal. La amonestación de La Palabra es “no satisfagan los deseos de la carne. No cabe duda que todos le prestamos atención a nuestro físico. Todos queremos vernos bien. Pero, ¿para quién y por qué razón? Si nos cuidamos para complacer a Dios y servirle mejor…¡qué bueno! Pero, bien sabemos que esa no es la razón. La “vanagloria de la vida” siempre ha sido, y siempre será problema para nosotros. Siendo así, Satanás lo usará al máximo en nuestra contra, trayendo cáos, inquietud y tristeza a nuestra alma. Ya sabemos que el primer paso, siempre es el más fácil. Cuando damos el primer paso, cediendo a la tentación, pasos dos, tres y cuatro, son más fáciles de tomar. Pero, aunque nuestra carne se satisfacerá por breves segundos, el daño causado al alma, será grande.

(3) Nosotros decidimos lo que vamos a hacer. Comprendamos que cada día de nuestra vida será uno de tomar decisiones que nos acercarán a Dios, o nos alejarán de Él. Quien decide lo que vamos a hacer es el “verdadero yo”, o sea, nuestra alma. Cada día (segundo a segundo), seremos confrontados con el obedecer a Dios, o desobedecerle. Lo que decidamos, determinará el estado de nuestra alma.

Amigo, ¿hay un vacío en tu alma que no has podido llenar? ¿Lo has intentado llenar con dinero, sexo, licor, drogas, diversión, etc.? Nunca lo lograrás. El Espíritu Santo te guiará a los pies de Jesucristo. Allí es donde encontrarás la paz que buscas. No te hagas sordo a Su llamado.

Hermano, ¿cuál es nuestra situación? ¿Habiendo comenzado por el Espíritu, vamos a regresar ahora a la carne? Eso sería un grave error, y tú y yo lo sabemos. Por mala que fuera nuestra situación en el mundo, nosotros podemos descansar, por la paz que tendremos cuando estamos siendo obedientes al Espíritu. Seamos obedientes y luchemos en contra de los deseos carnales que batallan con nuestra alma.

mayo 06, 2018

CUADERNO ESPIRITUAL PARA ESTA SEMANA


TEMA DE LA SEMANA - EXTRANJEROS Y PEREGRINOS



Aunque salvos por la gracia de Dios, nuestra alma todavía puede ser afectada por los deseos de la carne, robándonos la paz y alegría que vienen con una buena relación con Dios.

Juan 15:19 dice, “Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece.”

(1) Si fuéramos del mundo. Jesús dice que si fuéramos del mundo, el mundo nos amaría. Esto presenta un grave problema para quienes decimos tener a Jesús en nuestro corazón, pero no tenemos ningún problema con el mundo. Si no tenemos problema con el mundo, o estamos mintiendo (en cuanto a tener a Jesús en nuestro corazón), o no estamos viviendo en obediencia a la Palabra de Dios. Conste que ser obedientes a la Palabra incluye testificar. Y es mentira que puedes tomar el lado de Jesús y no tener problemas con el mundo (Santiago 4:4). Muchos llegamos al templo fingiendo estar en paz con Dios. Fingir es mentir. Podemos fingir todo lo que querramos. Fingir no arreglará la situación.

(2) No somos del mundo. El Maestro no vaciló al hacer este anuncio. Y no estaba hablando de apariencias, pues, las apariencias engañan. Hasta el diablo se presenta como “ángel de luz” (2 Corintios 11:14). Hay un movimiento muy peligroso que ha causado gran daño a la Iglesia. Muchos llamados “creyentes” (no digo que no lo sean, pues, no puedo ver su corazón), viven como si pertenecieran a ambos reinos: El reino de Dios y el reino del mundo. El mensaje que predican, es la mentira de que uno puede llevar una doble vida. Enseñan que con tal de que vaya los domingos al templo, todo estará bien. El problema con esto, es que aunque agrada a la carne, causa estragos y tormenta en el alma. No somos del mundo. Debemos buscar la santidad y ser santos como nuestro Padre es santo (1 Pedro 1:15). Esta mentalidad de que podemos tener duo afiliación con ambos reinos no es cierto.

(3) El mundo nos aborrece. Pero, ¿por qué nos aborrece? Nos aborrece porque…¡odia a Jesús! Y como nosotros vivimos de acuerdo a Sus mandatos y ordenanzas, viviendo en santidad, el mundo no nos quiere. Al estar en nuestra presencia son confrontados con su pecado, y no les gusta. Por eso, repito: Si no tenemos problemas con el mundo, es porque realmente no tenemos a Jesús en nuestro corazón, o estamos viviendo en desobediencia a las enseñanzas de Jesús.

En este mundo, los creyentes somos “extranjeros y peregrinos”. No somos del mundo. Estamos aquí por un tiempo para llevar a cabo la misión que nos ha sido encomendada por nuestro Rey, y en cuanto terminemos, iremos a casa. Por feas que se pongan las cosas en el mundo, si estamos cumpliendo nuestro deber y siendo fieles a Dios, tendremos paz en nuestra alma. Caminaremos confiados, sabiendo que la voluntad de Dios se está llevando a cabo. ¿Mis hermanos, tenemos esta paz? Obedezcamos a Dios para bien de nuestra alma.

TEMA DEL MES DE MAYO - PARA BIEN DE MI ALMA