En nuestro ejército tenemos tenemos diferentes ramificaciones: Fuerza aérea, la marina y el ejercito peruano, cada uno tiene su propio uniforme, equipo, método de trabajo, pero todos conforman en Comando Conjunto de la Fuerzas Armadas y se encargan de defender nuestra nación, sería tonto si un oficial de la marina se pasara a la fuerza aérea para exigir que las cosas se hagan como en la naval. No se podría. Puede que ambas ramificaciones tengan ciertas cosas en común pero es muy evidente la diferencia entre un barco y un avión. Los peligros son diferentes, los instrumentos son diferentes, todo es diferente. El oficial se frustraría por la inhabilidad de los soldados obedecerle (pues, no sabrían de qué estaba hablando), y ellos se frustrarían con el oficial por no saber dirigirles correctamente. ¿Qué tiene que ver esto con nosotros? Nuestra misión es la misma que cualquier otra Iglesia del Señor Jesucristo: Hacer discípulos, bautizarlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo y enseñarles a vivir de acuerdo a las cosas que Jesús nos ha mandado. Debemos engrandecer, proteger y defender el Reino de Dios. Pero, Dios nos ha dado una visión. Nuestra visión es la manera específica en la cual cumplimos la misión. Nuestra visión incluye un discipulado específico, Centros De Acción, Intino y Club Infantil. Es una visión que nos permite edificar de una manera más eficiente sobre lo que hacen los demás que tienen la misma visión.
Pero nuestra visión no es la única. Así como algunos se inscriben en la fuerza aérea en vez de la naval, así hay quienes prefieren otra visión, diferente a la nuestra. No hay nada malo en esto. Lo malo, sería entrar a una Iglesia que tuviera su visión, y no unirse a esa visión, luchando en contra de ella.
Por esta razón es que el Centro De Vida siempre busca un pastor entre los mismos Centro De Vida, pues, todos tienen la misma visión y pueden continuar su trabajo sin perder un solo paso. Claro está, que si quisieran cambiar de visión, también se puede. El asunto está, que al decir Centro De Vida, de inmediato lo identifican a uno con la visión. Cuando alguien dice “fuerza aérea”, no le viene a la mente la figura de un barco. Cuando alguien dice, “naval”, no surge la figura de un avión. Eso lo mismo con el Centro De Vida.
En el estudio de esta semana veremos que Jesús está enseñando directamente acerca de dos reinos, totalmente diferentes. En esta enseñanza, quisiera hacer hincapié sobre nuestra visión y la necesidad de estar unidos en lo que hacemos. Los religiosos en tiempos de Jesús, lo acusaron de ser instrumento del diablo. ¿Por qué? Porque no estaba haciendo las cosas como ellos querían que las hiciera.
Hoy, alrededor del mundo, tenemos hermanos y hermanas en la fe que están llevando a cabo la voluntad de Dios. La gran mayoría de ellos trabajan con otra visión. Pertenecemos al mismo Reino. Ellos, al igual que nosotros, son hijos de Dios. Trabajamos unidos en engrandecer y proteger el Reino, pero los métodos que utilizamos y la manera en que hacemos ciertas cosas, son diferentes.
