TEMA DEL MES

TEMA DEL MES

junio 01, 2012

El Tema de la Semana: CERTEZA Y CONVICCIÓN


Muchos de nosotros decimos confiar en Dios. Sin embargo, cuando nos toca obedecerle en alguna cosa difícil, comenzamos a poner nuestras excusas y pretextos, intentando justificar nuestra falta de confianza.
Esta semana, vamos a concentrarnos en la palabra “FE”.
La palabra “fe” se compone de dos letras: La “F”, y la “E”. Hno. Ricardo dice que estas dos letras representan lo que la fe nos da: Fuerza Espiritual.
El Diccionario Larousse Usual describe la palabra “fe” de la siguiente manera: (1) Fidelidad en cumplir los compromisos, lealtad, garantía. (2) Confianza en alguien o en algo. (3) Creencia en los dogmas de una religión.
Siendo la Biblia la Palabra de Dios, podemos dar por seguro que cuando se trata de la fe mencionada en nuestro texto, estamos hablando de Dios, y del hecho que debemos depositar nuestra plena y total confianza en Él. Fe es creer, sin tener pruebas, las cosas que Dios dice, aceptándolas como verdad, simplemente porque es Él quien las dice.
Es cierto que no podemos ver a Dios. Pero eso no significa que no existe. Así como vemos los efectos del invisible viento, también podemos ver los efectos de nuestro magnífico Dios. Sabemos que existe. Y porque sabemos que existe, creemos en Su Palabra. Confiamos en lo que nos dice, y aunque no podemos ver, ni entender cómo van a suceder muchas de las cosas que Su Palabra nos confirma, por fe las creemos.
Algo que comprueba que no es vana nuestra fe, son los millares de cosas que la Palabra ha declarado, y que ya se han cumplido. Además de eso, muchas de las cosas de las cuales la Biblia nos habla, se están cumpliendo ante nuestros propios ojos. ¡Hacemos bien en creer a Dios!    

El Tema Para El Mes de Junio es: FE


Seremos ridiculizados por decirlo, pero, los que somos discípulos de Jesús, no debemos vivir de acuerdo al escenario, las circunstancias, o situaciones que el mundo nos presenta. El mundo no tiene la última palabra, ni dicta la voluntad de Dios. Los discípulos de Jesús debemos vivir conforme a la voluntad de Dios, venga lo que venga, pase lo que pase. Quienes lo hacemos, no solo veremos acontecer milagro tras milagro en nuestra propia vida, sino que lo veremos en la vida de quienes nos rodean. Lo mejor de todo, es que sentiremos el agrado de Dios